La primera decisión al elegir una amoladora angular es determinar el propósito específico para el que se utilizará. Esto permite identificar las características y potencia que se necesitan para que la herramienta sea adecuada.
Algunos de los usos más comunes para las amoladoras angulares incluyen:
Corte y desbaste: Para cortar o desbastar metal, madera, plástico u otros materiales. Requiere discos de corte o desbaste y una potencia media o alta.
Pulido y acabado: Para pulir, lijar o dar acabado a superficies. Necesita discos de pulido/lijado y potencia media o baja.
Eliminar óxido y pintura: Para quitar óxido, pintura vieja o residuos adheridos. Utiliza discos de alambre o ruedas raspadoras. Potencia media o alta.
Corte en piedra o ladrillo: Para cortar bloques, losas o abrir ranuras en mampostería. Precisa discos diamantados y potencia alta.
Relacionar el propósito con la potencia es clave. Una amoladora sobredimensionada para un trabajo liviano puede resultar difícil de controlar. En cambio, una amoladora de poca potencia se esforzará en trabajos pesados. Considerar las tareas específicas a realizar ayuda a elegir la potencia óptima.
La potencia de la amoladora angular es uno de los factores más importantes a considerar, ya que determina la velocidad de rotación del disco y su capacidad de corte y remoción de material.
Las amoladoras angulares están disponibles en modelos de baja potencia de 500-1000 vatios, potencia media de 1100-1500 vatios y alta potencia de 1500 vatios o más. Cuál elegir depende principalmente del trabajo a realizar:
Las amoladoras de baja potencia son adecuadas para trabajos livianos como lijado, pulido y cortes en materiales blandos como madera, plástico o yeso. Son más ligeras y fáciles de controlar.
Las amoladoras de potencia media son ideales para la mayoría de trabajos de corte, desbaste y lijado en talleres de hobby o hogar. Tienen suficiente potencia para cortar ladrillos, cemento y metales ligeros.
Las amoladoras de alta potencia están diseñadas para trabajos intensivos y prolongados en obras de construcción e industria. Permiten realizar cortes más rápidos y agresivos en materiales duros como acero grueso, granito o hormigón armado. Requieren experiencia para controlarlas adecuadamente.
En resumen, mientras más dura y gruesa sea la aplicación prevista, se necesitará una amoladora angular de mayor potencia. Hay que buscar un equilibrio entre potencia suficiente y capacidad de control seguro de la herramienta. Las amoladoras más potentes siempre deben manipularse con cuidado extremo.
Los discos son un componente esencial de cualquier amoladora angular, y existen diversos tipos diseñados para aplicaciones específicas. Al elegir los discos correctos, podrás sacar el máximo provecho de tu amoladora angular.
Discos de corte: Estos discos tienen bordes afilados y son ideales para cortar metal, piedra, cemento y otros materiales duros. Los más comunes son los discos de corte abrasivos, hechos de materiales abrasivos unidos con resina. También existen discos de corte de diamante para los trabajos más exigentes.
Discos de desbaste: Sirven para remover material rápidamente y nivelar superficies ásperas. Los más populares son los discos de fibra, que usan fibras de vidrio o materiales sintéticos como abrasivos. Los discos de desbaste de flap, recubiertos de lija, son buenos para metal y pinturas.
Discos de pulido: Crean acabados finos y suaves en metales y piedras. Incluyen discos de lana de pulido, fieltro, algodón, espuma y flecos. Muchos vienen preimpregnados con compuestos de pulido.
Discos de alambre: Ideales para remover pintura, óxido y suciedad de metales. El alambre en la superficie actúa como un cepillo abrasivo.
Para obtener los mejores resultados, utiliza discos de buena calidad de marcas reconocidas. Revisa las RPM máximas permitidas y nunca las excedas. Cambia los discos cuando se gasten para mantener su efectividad. Con los discos adecuados, tu amoladora angular será más versátil y duradera.
Usar una amoladora angular puede ser peligroso si no se toman las medidas de seguridad adecuadas. Es importante tener en cuenta lo siguiente para evitar accidentes y lesiones:
Utilizar siempre gafas protectoras y guantes resistentes. Las gafas deben ser de seguridad, no simples gafas de taller. Los fragmentos y partículas que despide la amoladora pueden dañar fácilmente los ojos y las manos.
Usar protectores auditivos o tapones para los oídos. El ruido de las amoladoras angulares puede causar daños en la audición con el tiempo.
No usar ropa suelta, corbatas o joyas colgantes. Pueden engancharse en el disco giratorio. Usar ropa ajustada y recogerse el cabello largo.
Asegurar firmemente la pieza de trabajo. Usar prensas o tornillos de banco para inmovilizar la pieza. Una pieza suelta puede salir despedida de las manos.
No sobre-extenderse ni usar la herramienta en posiciones incómodas. Mantener ambos pies sobre suelo firme y un buen equilibrio.
Evitar encender la amoladora mientras está apoyada contra la pieza de trabajo. El disco puede quedar atorado y salir propulsado.
No utilizar discos agrietados o en mal estado. Reemplazar los discos deteriorados.
Dejar que el disco alcance su velocidad máxima antes de aplicarlo sobre el material. Forzar un arranque lento puede romper el disco.
No aplicar demasiada presión sobre el disco. Dejar que el disco haga el trabajo. Presionar en exceso puede atascarlo.
Seguir estas medidas simples de seguridad reducirá grandemente el riesgo de sufrir accidentes con la amoladora angular.
La ergonomía y comodidad al usar una amoladora angular son factores importantes a tener en cuenta, especialmente si se realizarán trabajos prolongados. Algunos puntos clave:
El peso y balance de la amoladora afectan la comodidad. Las amoladoras más pesadas cansan los brazos con el tiempo. Busque modelos con buen balance y relativamente livianos.
El diseño de la empuñadura es crucial. Debe ser de goma suave, con forma que se adapte a la mano y mangos laterales para mayor control.
Las amoladoras con interruptor deslizable son más cómodas que las de botón tradicional, ya que permiten encenderlas gradualmente.
El tamaño debe ser adecuado para su mano. Las amoladoras grandes son incómodas para personas con manos pequeñas. Pruebe sostenerlas en la tienda.
La posición del cable puede afectar la comodidad. Busque modelos donde el cable salga de la parte superior o el costado, no de frente.
Elija una amoladora que minimice la vibración mediante aislamiento interno. Las vibraciones excesivas causan fatiga.
En resumen, pruebe sostener la amoladora antes de comprarla y elija un modelo liviano, con empuñadura ergonómica, tamaño adecuado para su mano y posición de cable conveniente. Esto hará una gran diferencia en su comodidad al usarla.
Algunas amoladoras angulares cuentan con características adicionales que pueden agregar versatilidad y facilitar ciertos trabajos. A continuación algunas a considerar:
Bloqueo del eje: Permite bloquear el disco en una posición fija, lo cual es útil para realizar cortes y desbastes precisos. El bloqueo evita que el disco se mueva cuando no se desea.
Arranque suave: Arranca la amoladora gradualmente evitando una aceleración repentina. Ayuda a mantener el control de la herramienta. Ideal para iniciantes.
Protección térmica: Apaga el motor si se sobrecalienta para prevenir daños. Útil en trabajos prolongados o de alta exigencia.
Empuñadura antivibración: Absorbe las vibraciones para un trabajo más cómodo. Ayuda a reducir la fatiga en sesiones largas.
Muñequera: Permite un mejor agarre y control de la amoladora con una sola mano. Más versatilidad en espacios reducidos.
Cadena para colgar: Facilita almacenar la amoladora de forma segura cuando no está en uso. Mantiene el orden en el lugar de trabajo.
Es importante evaluar si estas u otras características avanzadas realmente se requieren de acuerdo al uso que se le dará a la herramienta. Muchas veces lo básico es suficiente para un uso doméstico ocasional. Pero para trabajos intensivos o profesionales, contar con prestaciones adicionales puede ser un plus.
Al elegir una amoladora angular, es crucial considerar el propósito y las aplicaciones específicas que se le darán a la herramienta. Esto determinará las necesidades de potencia y tipos de discos requeridos.
La seguridad debe ser la máxima prioridad, usando siempre el equipo de protección adecuado y tomando precauciones para evitar accidentes. Una buena ergonomía también es clave para trabajos prolongados.
Si planeas realizar múltiples aplicaciones, una amoladora de gama media o alta con varios discos puede ser la mejor opción. Para tareas ocasionales, una amoladora más económica puede ser suficiente.
Analiza honestamente tus necesidades y presupuesto. No pagues por prestaciones que no utilizarás. Y recuerda, no comprometas tu seguridad con equipos de baja calidad. Con una elección informada, la amoladora angular se convertirá en una invaluable herramienta en tus proyectos de bricolaje.